El Waterpolo al igual que cualquier deporte debe ser un derecho de cualquier ciudadano a su accesibilidad independientemente de la edad que tenga. Forma parte del derecho ciudadano de disfrutar DEPORTE con una parte de los impuestos que todos pagamos. Y es una responsabilidad política garantizar que ello se cumpla. Aparte de iniciativas privadas que puedan subvencionar y facilitar su desarrollo. Pero en su caso y a diferencia de otros deportes en España hay muchos elementos que están impidiendo su desarrollo a pesar de los resultados internacionales importantes que con él se han obtenido.
Realizando una breve valoración de su situación actual tanto en Madrid como en otras partes de España, debemos señalar que los principales inconvenientes para su desarrollo vienen dados por los siguientes aspectos:
-Poco apoyo de las administraciones públicas a los Clubes y Federaciones que tratan de desarrollarle, y aún más acrecentado con la situación de crisis económica y que además sirve de justificación para deficiencias en su gestión. Fundamentalmente en la distribución de espacios y horarios en las instalaciones municipales, las cuales independientemente del tipo de gestión, privada o pública, no tienen interés especial en crear y garantizar la infraestructura necesaria. Se da prioridad a actividades más lucrativas y menos masivas pero más fáciles de controlar. Incluso en los proyectos de nuevas piscinas no se considera en muchos casos la adecuación de estas a la práctica y normas para hacer este deporte, incluyendo la falta de graderías para su divulgación. Este es un mal aún más grande pues no sólo afecta al Waterpolo sino también a otros deportes. Es un problema de cambio de filosofía de la práctica del deporte en la mentalidad de los que lo gestionan, y un control más estricto al uso racional de los recursos públicos con que se dispone. Y más cuando aún persistimos en Madrid tener opción a celebrar unos Juegos Olímpicos en el futuro.
-Hay muchas instalaciones deportivas que poseen piscinas que con algunas inversiones podrían climatizar sus piscinas que sólo se abren en el verano, y que podrían ampliar la oferta de espacios y horarios para todo tipo de actividades acuáticas.
-Desconocimiento y falta de propaganda necesaria para que la población lo conozca a fondo y pueda disfrutarlo. En ello interviene el hecho de que a nivel de la base y ya en el resto de categorías los medios de comunicación no se implican nada o casi nada en su divulgación de sus competiciones ya sea el nivel que tengan. Mencionar ejemplos y comparaciones seria extenso.
-Deficiencias del trabajo de formación de entrenadores, árbitros y jugadores lo cual hace aúnas difícil el arranque o desarrollo de Clubes o Equipos de nueva creación o escasos recursos
-Otros aspectos subjetivos y o incluso intereses personales que frenan el desarrollo de iniciativas o ideas encaminadas a desarrollar este deporte en todas las categorías.
-Falta de interés de empresas privadas por patrocinar un deporte que por simple desconocimiento piensan que no puede llegar a una gran población lo cual no les garantiza la publicidad de sus marcas. Donde quizás pueda existir expectación pública por los Waterpolistas, por su infraestructura o su interés deportivo, no se valora la posibilidad de que sea una gran fuente propagandista, ni cómo mejorarla.
-Elevados costes de alquiler de piscinas y de su infraestructura (porterías, balones, gorros, etc.) tanto para entrenar como para competir. Podrían mencionarse muchas cosas más pero sólo los “pocos locos” que gratuitamente promocionan y aman este deporte, son quizás, los únicos que lo entenderían. O tal vez no son capaces de concienciar al resto de personas para que lo apoyen.
¡Eso si, lo que nunca falta son ganas y deseos de resolver estas dificultades y seguir amando a este deporte! A pesar de los inconvenientes que existan. Ojalá estos mensajes ayuden a reflexionar a muchos y logremos poner al Waterpolo en el lugar que merece.
Realizando una breve valoración de su situación actual tanto en Madrid como en otras partes de España, debemos señalar que los principales inconvenientes para su desarrollo vienen dados por los siguientes aspectos:
-Poco apoyo de las administraciones públicas a los Clubes y Federaciones que tratan de desarrollarle, y aún más acrecentado con la situación de crisis económica y que además sirve de justificación para deficiencias en su gestión. Fundamentalmente en la distribución de espacios y horarios en las instalaciones municipales, las cuales independientemente del tipo de gestión, privada o pública, no tienen interés especial en crear y garantizar la infraestructura necesaria. Se da prioridad a actividades más lucrativas y menos masivas pero más fáciles de controlar. Incluso en los proyectos de nuevas piscinas no se considera en muchos casos la adecuación de estas a la práctica y normas para hacer este deporte, incluyendo la falta de graderías para su divulgación. Este es un mal aún más grande pues no sólo afecta al Waterpolo sino también a otros deportes. Es un problema de cambio de filosofía de la práctica del deporte en la mentalidad de los que lo gestionan, y un control más estricto al uso racional de los recursos públicos con que se dispone. Y más cuando aún persistimos en Madrid tener opción a celebrar unos Juegos Olímpicos en el futuro.
-Hay muchas instalaciones deportivas que poseen piscinas que con algunas inversiones podrían climatizar sus piscinas que sólo se abren en el verano, y que podrían ampliar la oferta de espacios y horarios para todo tipo de actividades acuáticas.
-Desconocimiento y falta de propaganda necesaria para que la población lo conozca a fondo y pueda disfrutarlo. En ello interviene el hecho de que a nivel de la base y ya en el resto de categorías los medios de comunicación no se implican nada o casi nada en su divulgación de sus competiciones ya sea el nivel que tengan. Mencionar ejemplos y comparaciones seria extenso.
-Deficiencias del trabajo de formación de entrenadores, árbitros y jugadores lo cual hace aúnas difícil el arranque o desarrollo de Clubes o Equipos de nueva creación o escasos recursos
-Otros aspectos subjetivos y o incluso intereses personales que frenan el desarrollo de iniciativas o ideas encaminadas a desarrollar este deporte en todas las categorías.
-Falta de interés de empresas privadas por patrocinar un deporte que por simple desconocimiento piensan que no puede llegar a una gran población lo cual no les garantiza la publicidad de sus marcas. Donde quizás pueda existir expectación pública por los Waterpolistas, por su infraestructura o su interés deportivo, no se valora la posibilidad de que sea una gran fuente propagandista, ni cómo mejorarla.
-Elevados costes de alquiler de piscinas y de su infraestructura (porterías, balones, gorros, etc.) tanto para entrenar como para competir. Podrían mencionarse muchas cosas más pero sólo los “pocos locos” que gratuitamente promocionan y aman este deporte, son quizás, los únicos que lo entenderían. O tal vez no son capaces de concienciar al resto de personas para que lo apoyen.
¡Eso si, lo que nunca falta son ganas y deseos de resolver estas dificultades y seguir amando a este deporte! A pesar de los inconvenientes que existan. Ojalá estos mensajes ayuden a reflexionar a muchos y logremos poner al Waterpolo en el lugar que merece.
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